Si hemos pasado la mitad de nuestras vidas quejándonos de que no hemos tenido tiempo de hacer gran variedad de cosas pues estamos trabajando o estudiando, este es el momento ideal e irrepetible para que nos dediquemos a realizarlas. Algunas de nuestras recomendaciones son evidentes y convencionales, mientras que otras no tanto, y lo mejor es que pueden ser realizadas solos o en compañía, con o sin tecnología.
Para estar entretenidos, relajados y ocupar el ocio
- Ir al armario y sacar los rompecabezas y juegos de mesa, a los que podemos adicionarles retos que se asocien a lavar loza, arreglar la casa o cocinar.
- Colorear mandalas.
- Si no te has atrevido o eres el rey de los juegos de consola, este es el momento de ser la estrella, pues además implican movimiento físico.
- Meditar, practicar yoga, pilates o cualquier otra actividad que se adapte a tus gustos y circunstancias.
- Hacer lectura de novelas, poesía, ficción o biografías de aquellas personas que admiramos.
- Retomar todas esas aficiones que tanto te gustan como la pintura, dibujo, escultura, diseño, fotografía, costura o bordado.
Mantener la salud
- Estar pendiente de nuestra hidratación, mientras nos alimentamos de manera sana y podemos dormir “a pierna suelta” si tanto lo deseamos.
- La actividad física puede ser mantenida de la manera en que prefiramos.
- Hacer la limpieza y desinfección de las superficies en el hogar.
- Bajar archivos del celular al computador y de esta manera liberar espacio de memoria.
- Actualizar y perfeccionar la hoja de vida, y de las redes sociales
- Crear, organizar o actualizar sus listas de música
- Limpiar, organizar y/o reparar, y también regalar esas cosas que ya no estamos usando.
- Organizar la biblioteca.
- Hacer de nuestro hogar uno más sostenible: por ejemplo, crear colectores de agua lluvia.
Relación con los otros
- Organizar grupos de lectura y luego compartir sobre el mismo, presencial o virtualmente.
- Escribir una carta de una o dos páginas, de su puño y letra, para alguien de quien te encuentres muy agradecido, esté vivo o no, en donde le expreses lo que siente.
- Hablar con un amigo o ser querido cada día, sobre todo con aquellos a los que hace tiempo no contactabas debido al ritmo de vida que venían llevando.
- Habla de lo que sientes en ambientes seguros, con familiares o amigos.
- Crea y comparte el álbum genealógico de la familia.
- Buscar la manera de vincularse y participar en un voluntariado
- Compartir con familiares y amigos distantes a través de videoencuentros.
- Crear un google Doc como documento a fin de compartir con amigos, familiares o colegas sobre determinado tema.
Mejoramiento – Aprendizaje
- Escribir un diario en donde se plasme lo que sentimos, vivimos y estamos experimentando en medio de esta novedosa situación, nos servirá como purgante psicológico, y como una fuente de reflexión y acción para el futuro.
- Hacer una carta para nuestro yo del futuro.
- Practicar recetas de cocina.
- Realizar cursos online o revisar tutoriales en YouTube
- Crear un documento visual, escrito o ambos, con secuencia cronológica que refleje su propia vida o biografía.
- Aprender o perfeccionar un idioma.
- Practicar o aprender algún tipo de baile que nos agrade
- Diseñar o dirigir nuestro propio webinar o canal virtual.
- Escribir artículos, crear nuestro propio sitio virtual en el que podamos compartir con otros sobre lo que sabemos y nos apasiona.